Las hepatitis virales causan más de un millón de muertes por año en todo el mundo
Ministerio de Salud Pública Noticias de Salta Salud 28/07/2021 06:40Existen cinco tipos de esta enfermedad, aunque sólo dos de ellas pueden prevenirse con vacuna. Es importante realizarse las pruebas para diagnóstico y completar el tratamiento indicado.
El 28 de julio es el Día Mundial contra la Hepatitis. La fecha fue establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para reforzar la información sobre las hepatitis virales, la forma de prevenirlas y las posibilidades de tratamiento médico.
En este marco, el Ministerio de Salud Pública invita a la población a informarse sobre estas enfermedades, realizarse las pruebas correspondientes y, en el caso de un resultado positivo, iniciar el tratamiento y completarlo de acuerdo con la indicación del médico.
Asimismo, recomienda realizarse el test para detección de hepatitis C y vacunarse contra la hepatitis B, especialmente en personas adultas.
El Día Mundial contra la Hepatitis se instauró como homenaje al médico, bioquímico, doctor en filosofía y científico estadounidense Baruch Samuel Blumberg, nacido el 28 de julio de 1925, galardonado con el Premio Nobel en Medicina en el año 1976. Fue él quien identificó el virus que causa la hepatitis B y posteriormente desarrolló su vacuna.
Grupo de enfermedades
Las hepatitis virales, también llamadas víricas, se clasifican en cinco tipos, que son: A, B, C, D y E. Son enfermedades infecciosas que causan daño agudo y crónico como cirrosis y cáncer de hígado.
Las del tipo B y C son las más severas, ya que la mayoría de las muertes son provocadas por éstas.
Estas patologías son prevenibles y tratables. Existen vacunas y tratamientos efectivos para la hepatitis B. Por otra parte, más del 95% de los casos de hepatitis C pueden curarse en un plazo de tres a seis meses de terapia.
Se estima que sólo un 5% de las personas que padece hepatitis crónica sabe que tiene la infección y menos del 1% accede a tratamiento. Por ello, es de suma importancia la prevención y el diagnóstico temprano.
Hasta el momento, sólo se han desarrollado vacunas contra los tipos A y B. La vacuna contra hepatitis A consiste en una sola dosis, que se coloca al año de vida. Desde el año 2012, la vacuna contra hepatitis B se incluye en el calendario nacional de vacunación para todas las edades.
Problema mundial
Según la OMS, en todo el mundo hay aproximadamente 257 millones de personas con hepatitis B crónica y 71 millones con el tipo C, también crónico.
Por otra parte, se estima que cada año fallecen más de un millón de personas a causa de una hepatitis viral.
Los cinco virus de la hepatitis (A, B, C, D y E) son distintos y pueden propagarse de diferentes maneras. Estos virus se propagan de diferente manera y causan diferentes síntomas.
Hepatitis A
- Por lo general, este virus se transmite a través del contacto con alimentos, bebidas u objetos contaminados con materia fecal de una persona infectada.
- También se puede transmitir por contacto directo con una persona infectada.
- No causa una infección crónica para toda la vida y raramente es mortal, pero puede producir síntomas graves.
- La vacunación es la mejor manera de prevenir la hepatitis A.
- La buena higiene de las manos, condiciones sanitarias óptimas y una mayor seguridad de los alimentos, también pueden prevenirla.
- La gran mayoría de los pacientes se recuperan y quedan inmunes de por vida, aunque una pequeña proporción de casos pueden complicarse y ocasionar la muerte.
- Son factores de riesgo, el agua no segura, la falta de higiene o la higiene inadecuada de manos, relaciones sexuales sin protección, e inyección de drogas.
Hepatitis B
- Este virus se transmite con mayor frecuencia de una madre infectada a su bebé durante el nacimiento y entre los niños que no se han vacunado.
- Las personas también se pueden infectar a través del contacto con la sangre y otros líquidos corporales mediante el uso de drogas inyectables, equipo médico no esterilizado y el contacto sexual.
- El contagio por vía sexual se da sobre todo en varones que no han sido vacunados y mantienen relaciones sin protección con otros varones. También se produce en individuos heterosexuales que se relacionan con varias personas.
- Otra vía de transmisión puede ser la realización de tatuajes no segura, o por el uso de objetos contaminados con sangre infectada, como máquinas de afeitar.
- Puede variar, desde una afección leve que dure pocas semanas, hasta una enfermedad grave y crónica.
- Si una persona se infecta al nacer o durante la primera infancia, es más probable que presente una infección crónica, lo que puede causar cirrosis o incluso cáncer de hígado.
- La vacuna contra la hepatitis B es la forma más eficaz de prevenirla.
- La OMS recomienda que todos los bebés reciban la vacuna tan pronto como sea posible después del nacimiento, seguida de 2 a 3 dosis adicionales.
- Se estima que una de cada 100 personas infectadas con hepatitis B también han contraído el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), lo que se denomina coinfección.
- Todas las personas detectadas con VIH deben tener la vacuna contra la hepatitis B y recibir el tratamiento correspondiente.
Hepatitis C
- El virus de la hepatitis C se transmite mediante el contacto con la sangre de una persona infectada.
- La infección puede ocurrir a través de la sangre, al compartir jeringas, por prácticas sanitarias poco seguras, transfusión de productos sanguíneos sin analizar o prácticas sexuales sin protección.
- También se puede transmitir, aunque es muy raro que ocurra, de una mamá infectada a su bebé durante el parto.
- No se transmite a través de la leche materna, alimentos o agua, ni por contacto ocasional con una persona infectada, como abrazos, besos o compartir comidas o bebidas.
- El virus puede causar, tanto infecciones agudas como crónicas, siendo las segundas las de mayor ocurrencia.
- La gravedad varía entre una dolencia leve, que dura algunas semanas, y una enfermedad grave, de por vida.
- Una cantidad significativa de personas con infección crónica puede desarrollar cirrosis o cáncer de hígado.
- Los nuevos tratamientos permiten que más del 90% de los pacientes con hepatitis C puedan lograr la cura en 2 o 3 meses, lo cual reduce el riesgo de muerte.
- Aún no se ha desarrollado una vacuna para la hepatitis C, aunque existen fármacos antivíricos que pueden curar más del 95% de los casos.
- El diagnóstico temprano es muy importante, ya que la enfermedad puede no presentar síntomas durante mucho tiempo y la persona infectada puede transmitir el virus a otras.
- Se recomienda efectuarse las pruebas de diagnóstico a personas que puedan estar expuestas a mayor riesgo, como consumidores de drogas inyectables y no inyectables, residentes en establecimientos carcelarios, hijos de madres infectadas, parejas de personas infectadas, personas con VIH, con tatuajes o perforaciones ornamentales.
Hepatitis D
- Este virus se transmite mediante el contacto con sangre infectada.
- La hepatitis D solamente se produce en las personas que ya están infectadas con el virus de la hepatitis B.
- La infección por el virus de la hepatitis D puede prevenirse mediante la vacunación contra la hepatitis B.
Hepatitis E
- Se transmite, principalmente, a través de agua para beber contaminada.
- Las mujeres embarazadas que tengan hepatitis E están en considerable riesgo de morir debido a esta infección.
- La infección puede desaparecer en seis semanas, pero en otros casos evoluciona hacia una insuficiencia hepática aguda, que puede ser mortal.
- La mejor calidad del agua y de las condiciones sanitarias puede ayudar a prevenir casos de hepatitis E.
- Hasta el momento no existe vacuna autorizada contra la hepatitis E.
- La prevención consiste en mantenimiento de hábitos higiénicos y el no consumo de agua o hielo que no se tenga la seguridad de que estén libres de contaminación.
Fuente: Secretaría de Prensa y Comunicación